Lo tenía frente a mi, seguía mas chato que yo, su sonrisa tan perfecta, sentía la yema de sus dedos esas heridas que el mismo se provoca, mis noche de soledad fueron invadidas por él, y su presencia en mi cuarto, sentí su cariño por mi, él realmente se estaba esmerando, lo estaba haciendo, noté ciertos cambios en él, y hasta un determinado punto, me encantaba la idea de conocer a ese nuevo chinito.
Pero, ya no hay absolutamente nada de sentimientos hacia el, mis ganas de escribir, de llenarlo de sorpresas, de decirle todo lo que siento en una carta o subir vídeos a youtube ya no están en mi, no existe nada de amor por él, todo lo bonito y maravilloso que sentía, se alimentaba prácticamente de él y ese pequeño cariño que yo pudiera recibir, él fue el único que dio vida a lo que yo sentía y también terminó de matar mi ilusión, mi intención no es reprochar, pero yo ya no tengo nada que hacer a su lado, y lo digo sintiéndome tranquilo conmigo mismo, sin resentimiento, ni mala onda, tengo planeado otras cosas para mi, y la experiencia es algo que me marcó, no voy a ir deprisa, iré poco a poco, escribiendo otra historia, una historia llena de sonrisas.
Aquí no hay culpable, no hay pecado, no hay verdad, no hay nada.
se provocaba heridas???
ResponderEliminarcaray! bueno el pasado es mejor dejarlo ahi! en el pasado!!
Habiendo tan buen menu en el restaurante de la vida! Te pregunto YO! por que vas a repetir el mismo plato???
porque el lechón está de moda?
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